Muchas personas consideran que toda cirugía plástica es igual, sin embargo, un relleno de labios no es lo mismo que una cirugía de nariz y una lipoescultura no es igual a una abdominoplastía, que además es considerada un procedimiento quirúrgico mayor. ¿Eso qué significa? Pues no sólo una mayor duración de la intervención sino que compromete más el organismo, por lo que tomará mayor tiempo para la recuperación. Esto debe ser considerado previamente, ya que no se pueden realizar las tareas habituales ni reintegrarse al trabajo, por ejemplo, por unas semanas.

¿Qué puede esperarse luego de la intervención quirúrgica? En realidad es importante saber que los resultados se comenzarán a ver a corto plazo y el definitivo en pocos meses. Al inicio el abdomen estará hinchado durante varios días, se pueden apreciar hematomas y puede haber molestias en toda la zona operada, por lo que probablemente el cirujano indique analgésicos en dosis adecuada al caso. Se verá una cicatriz notoria que, incluso, puede hacerse más evidente con el paso de los días, sin embargo, luego de los primeros seis meses comenzará a reducirse y poco a poco se hará casi imperceptible, aunque como toda cicatriz, jamás desaparece por completo. El uso de productos especiales puede ayudar a una mejor cicatrización y su médico puede informarle al respecto.
En cuanto a la recuperación, no se puede hacer actividad física de inmediato y el reposo estará de acuerdo a la dimensión de la operación realizada. Cuando se reanude la actividad deberá ser en estricto cumplimiento de las indicaciones del cirujano plástico. Muchos pacientes son autorizados a reiniciar una vida normal alrededor de los 30 días posteriores a la operación y 15 podrá realizar actividad física o deportes, siempre de acuerdo a la evaluación y criterio de su médico.
Una de las grandes ventajas de la abdominoplastía es su duración, ya que es casi permanente, teniendo los cuidados del caso y si no hay un nuevo embarazo. En caso de una nueva gestación el resultado puede renovarse con otra abdominoplastía y en el caso de que haya un aumento ligero de peso, no es necesario recurrir al bisturí.